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Lugares de cultura y procesos participativos en Sarajevo

Foto/Domovi Kulture, Autor: Lejla Kresevljakovic © Fotògraf: Anida Kreco

Este octubre, Sarajevo ha acogido el congreso internacional "Importance of the Place" focalizado sobre el tema "ciudades y paisajes culturales: entre el reconocimiento, la protección y la utilización". El congreso se centra principalmente en lugares históricos antiguos y su preservación. Es por eso que destaca, como un bicho raro, la exposición "Domovi Kulture" (centros culturales), de la arquitecta Lejla Kresevljakovic, inaugurada en el marco del mismo congreso. Es el resultado de una investigación sobre los edificios proyectados y construidos como centros culturales de la época socialista, y que hoy en día han quedado principalmente en desuso. En palabras de la autora de la exposición, "La mayor parte del antiguo centro cultural en BiH ha sido restaurado por la administración local, los daños de la guerra han sido reparados y los edificios están en un estado de usabilidad. Sin embargo, el papel y la importancia que alguna vez tuvieron no han sido renovados ".

El nombre de la exposición "Domovi Kulture", es como se denominan en el idioma bosnio los equipamientos destinados a la acogida y la promoción de actividades culturales, y que se traduce literalmente como "hogares de cultura", que en Cataluña habitualmente denominamos como "centros culturales", "casales" y etc. Dado que la exposición de las "hogares de cultura" forma parte del congreso centrado en "Lugares", con mayúscula, tal vez podríamos hablar de "Lugares de Cultura", donde es justamente la Cultura, también con mayúscula, la que hace posible la su clasificación de "Lugar", siguiendo el razonamiento de Marc Augé sobre los "No-lugares".

Es una exposición diferente al resto de temas tratados en el congreso, que habla de unos equipamientos muy específicos y de unas arquitecturas muy marcadas por un uso y una época, no tan lejanos en el tiempo. Aquí no hay ruinas antiguas, ni edificios protegidos por la UNESCO. Es una recopilación de edificios anónimos, sin ninguna pretensión más allá de acoger de la mejor forma posible el uso para el que fueron destinados: generación y promoción de actividades culturales. Dar un servicio público que, desgraciadamente, no suele ser considerado de primera necesidad, pero que en la realidad es básico para una sociedad avanzada, crítica, madura y democrática. Y justamente por eso, son también "Lugares", por definición, y en este caso, "Lugares" a los que puede ser no se ha prestado la atención adecuada.

 

Pero, lo que encuentro más interesante, es que se trata de un uso que en la era de la sociedad red, basada en los espacios digitales, ha evolucionado mucho respecto a la época para la que estuvieron pensados ​​estos "Sitios de cultura ". La transformación de la actividad ha sido radical: los límites entre la escala local y global se han borrado hacia aquella escala "glocal" de Manuel Castells; la diferenciación entre los productores y los consumidores de contenidos ha desaparecido, donde todos nos hemos convertido en "prosumidores"; y la línea entre el espacio físico y digital se ha borrado, creando unos incipientes "espacios híbridos", que funcionan transversalmente a las escaleras tradicionales, donde el conocimiento se genera en red, y nos lleva hacia la "inteligencia col colectiva "de Pierre Levy. Es por ello que hablar hoy en día de "lugares de cultura" implica cambiar de paradigma, y ​​es por ello, que esta exposición ha llamado mi atención.

 

Es en este sentido que la exposición no sólo cataloga los espacios de los lugares de cultura, sino que también propone el rol de los arquitectos en su rehabilitación y reactivación, a través de dinamizar la participación ciudadana, o en palabras de la autora, el diseño participativo: "en el modelo de gestión contemporánea, se hace hincapié en la iniciativa social y la participación a través del sector de la sociedad civil, que está claramente subdesarrollado para iniciar actividades en el área de los centros culturales. Esta investigación tiene como objetivo llamar la atención sobre el papel que los arquitectos, como miembros responsables de la comunidad pueden tener hacia la activación de la comunidad local por los métodos de diseño participativo. " También me ha interesado comprobar cómo se puede analizar este tema en una sociedad, la de Bosnia-Herzegovina, igual de contemporánea, pero más deprimida, que las sociedades de Europa occidental. ¿Sigue viable proponer el hecho cultural como una necesidad de primer orden? ¿Sigue vigente canalizarlo a través de los hogares de cultura? ¿Como deberían ser los mismos en la sociedad actual?

 

Para intentar responder a estas y otras preguntas, he mantenido una conversación con Lejla Kresevljakovic, arquitecta y autora de la exposición "Domovi Kulture", y con Muhamed Serdarevic, también colega de la profesión, que me ha puesto en contacto con la autora de la exposición. Hemos conversado, y me han dado su parecer, sobre una serie de reflexiones que les he planteado en relación a las "hogares de cultura" y el papel en general del arquitecto y la arquitectura en la sociedad actual.

Identificar un problema es siempre el primer paso hacia su resolución. Entiendo que la exposición "Domovi Kulture" es este primer paso. Pero, una vez identificado el problema, ¿ahora qué? ¿Cuáles deberían ser los siguientes pasos?

 

L. Kresevljakovic: "Para la rehabilitación de la función e importancia de los centros culturales, se requiere una idea casi revolucionaria, o una idea que salga del marco y de la práctica actual. Hay un montón de problemas en la vida diaria de las personas que no pueden ser resueltos con métodos y procedimientos de las autoridades y de la administración, o cualquiera de las formas comerciales ya conocidos. Ante estos problemas, hay soluciones que rompen modelos tradicionales y ofrecen nuevas. Las nuevas soluciones van más allá de la tradicional dicotomía en términos de privado-público, local-global, los consumidores-productores, necesidad-deseo, etc., ya que la mayoría de estas soluciones son al mismo tiempo el carácter local y global, ya que los consumidores en la mayoría de los casos son también los productores, y ya que las necesidades y deseos personales en muchos casos son coincidentes. Tiene que haber una ruptura con los flujos habituales, es decir, con modos de pensamiento que se consideran "normales".

 

M. Serdarevic: "Es importante que alguien (Leija Kresevljakovic) de esta manera toque el tema, y ​​más, dentro de esta conferencia donde el patrimonio cultural se considera sólo edificios y espacios" antiguos ". Por eso es interesante observar también los espacios que explican el pasado reciente, ya que ahora todavía podemos hacer algo y revitalizarse o equiparlos para propósitos similares y complementarios, antes de que se conviertan en ruinas, ya bastante antiguas como para empezar a tratarlos como tales, donde podrían estar interesadas ya algunas de las próximas generaciones. "

 

¿Y cómo afecta este hecho al arquitecto? ¿Cuál es este nuevo rol que tenemos que jugar? Últimamente se habla mucho de "facilitadores", pero ¿cómo definirías tú este nuevo rol?

 

L. Kresevljakovic: "Si desde este punto de vista nos fijamos en la práctica arquitectónica habitual, podemos decir que su compromiso con la reconstrucción de los hogares de cultura estaba en el área de resolución de problemas de tipo físico, especializados y profesionales, pero sin un examen crítico sobre una concepción espacial que es obsoleta, sin participación en el estudio de necesidades reales y preferencias de la comunidad local. Para que las actividades arquitectónicas sean parte de la renovación activa de los hogares de la cultura, hay que salir de estos marcos actuales. Hay varias condiciones que deben cumplirse, es decir: (1) los diseñadores se incluirán en una imagen más amplia del cambio social, más allá de la viabilidad económica, (2) que el diseño se entienda como un esfuerzo colectivo, donde el proceso de diseño esté muy extendido entre los diferentes grupos de interés y diversas áreas de expertos, y (3) que las ideas propuestas sean presentadas, y testadas por parte de los futuros usuarios, es decir, probadas de forma empírica y orientada al usuario en la fase inicial del diseño. De hecho, todas estas características son propias del co-diseño. Considero que la práctica del diseño arquitectónico con métodos de co-diseño nos puede hacer salir del marco actual, y contribuir al cambio social. "

 

"La primera característica mencionada de co-diseño, promueve una diferencia con el espíritu consumista de gran parte de productos de diseño que tenemos la oportunidad de ver en la vida cotidiana. Vivimos en una sociedad de consumo dominante. El diseño que conocemos es egocéntrico, impulsado por el deseo de expresar el poder, la dominación, el éxito y la fama. En una sociedad impulsada por el ego, el dinero y los beneficios, las estrellas arquitectónicas son un fenómeno muy esperado. Sin embargo, este tipo de diseño no contribuye al cambio social, sino que determina la situación existente en la sociedad. Por lo tanto, tenemos que distinguir este tipo de diseño de un co-diseño impulsado por las ideas opuestas, la idea de igualdad, de participación, más allá de los límites de la viabilidad económica. La intención o esfuerzo final es que la intervención de un diseñador crezca o sea parte de uno.

cambio social. Este objetivo se puede conseguir a través del propio proceso de diseño y a través de la aspiración hacia los resultados del diseño humanitario, social y culturalmente sostenible. Así, desde mediados del siglo pasado, han funcionado arquitectos como Cristopher Alexander, Hemanna Hertzberg, etc. a un contemporáneo como Alejandra Aravena, Janne Gang, etc. "

 

Cuando hablamos de co-diseño, o diseño cooperativo, consideras que es toda la comunidad la que debe participar, o nos centramos en los diseñadores profesionales y los usuarios finales, ¿cómo una simplificación del problema de la gestión de los procesos participativos?

 

L. Kresevljakovic: "En el proceso de toma de decisiones sobre el espacio, no sólo deben participar los diferentes profesionales de la práctica, sino toda la población local como futuros usuarios del espacio. Co-diseño en un sentido amplio se refiere a la creatividad de los diseñadores y también de las personas que no están formadas como diseñadores, para trabajar juntos en el proceso creativo. Pueden ser personas pertenecientes a categorías especiales, pueden ser futuros usuarios, pueden ser expertos de diferentes campos, etc. Por tanto, el co-diseño es un tipo especial de co-creación. El punto de partida en el proceso de diseño, donde se define la tarea, es el momento más importante para la inclusión de un mayor número de participantes en la discusión, porque es en este momento del proceso de co-diseño donde se obtienen los mejores resultados. De hecho, ¡este es el siguiente paso! La inclusión del mayor número de participantes en el proceso de definición del proyecto para la reconstrucción y activación de los hogares de cultura. "

 

Consideras que un "hogar de cultura" tal como lo conocemos, aunque sigue vigente y tiene su lugar en la sociedad y contexto actuales, o bien, se debería repensar de alguna forma. De hecho, ¿son sólo necesarias todavía las “hogares de cultura”?

 

L. Kresevljakovic: "Los hogares de cultura como las que había en BiH todavía existen, pero en BiH ya no. Los hay en toda Europa. Barcelona, ​​por ejemplo, tiene una gran red de estos centros sociales. La cuestión es si los centros culturales se necesitan en la sociedad actual de BiH. El nuevo sistema de valores en la sociedad de Bosnia-Herzegovina, que se basa en puntos de vista individualistas y materialistas de la realidad, es omnipresente y borra la idea de la acción colectiva. La mayoría de las personas pensarán sobre dónde llevar a los niños a un curso de informática o de un idioma extranjero, como pagarlo, y etc., pero casi nadie pensará en intentar organizar algo así a nivel de la comunidad local, para los niños del vecindario, por el área de la escuela local, o al ámbito de un hogar de cultura que aún existe. De esta manera se disuelve la sociedad, que es evidente en todas partes. "

"Las personas se separan por varios motivos, pero hay muy pocos lugares que son justamente puntos de conexión, lugares de reunión, lugares donde se pueden encontrar y conocer personas que de otra manera nunca se hubieran conocido. Para la comunidad local, no tener este lugar de encuentro significa no tener el punto de inflexión, el lugar donde se reunirán los ricos y los pobres, los formatos y los sin formación, donde, en definitiva, las personas podrán reunirse y ayudarse mutuamente. Las oportunidades son enormes. Hay que reflexionar sobre cuál es el hogar de cultura contemporánea, tener una visión diferente de la realidad, y tomar la iniciativa. "

 

M. Serdarevic: "Si aceptamos que la arquitectura de una determinada manera es el espejo del tiempo en que surge, entonces los hogares de la cultura y los contenidos que ofrecen, son el espejo de la realidad del tiempo en que vivimos. Cito los ejemplos que he visto en Barcelona, ​​y se puede decir que es más digitalizada que Sarajevo y con un número creciente de usuarios de Internet y una forma de vida más rápida, pero donde todavía existen bibliotecas y centros culturales basados ​​en asociaciones de vecinos. Son ejemplos que he visitado y usado varias veces, como la instalación situada justo encima de la biblioteca "Juan Margall" en Sant Gervasi, recientemente inaugurada, donde, por ejemplo, las clases de yoga, o cursos y actividades varias siguen teniendo lugar y atractivo, tanto para visitantes como para usuarios locales. O simplemente, sigue vigente como lugar de reunión del vecindario. "

 

¿Son, por tanto, los hogares de cultura centros claves para la cohesión social a escala local?

L. Kresevljakovic: "Los centros culturales eran factores cohesivos de las comunidades locales. La mayoría de las definiciones de vecindario incluyen dos aspectos generales, el físico y el social, y centros culturales que reúnen los dos aspectos. Fueron lugares de encuentro, lugares en los que las comunidades locales se identificaban como partes de una comunidad más grande, la de la ciudad, donde se asentaron, y desarrollar su identidad. Conscientes de sus propias necesidades culturales, los miembros de estas agrupaciones locales deben pasar de la actitud de recibir un servicio, a la actitud de co-gestinar y co-producción, en el proceso de renovación de los hogares de cultura. La inclusión de las comunidades locales en el proceso de reconstrucción significaría la integración social, el fortalecimiento de su relación con los centros de la comunidad, desarrollando un sentido de pertenencia, que prometa una mayor probabilidad de que el hogar de cultura se implemente y sea ​​aceptada por la comunidad local, y se convierta en el centro social y cultural de la comunidad local. "

 

Como un lugar físico y local (en este caso un "hogar de cultura", pero ¿sería aplicable a cualquier artefacto arquitectónico), se integra en una sociedad global y deslocalizada como la actual? Y concretamente, ¿qué influencia tiene este hecho social sobre la cultura y su difusión? Finalmente, ¿cuál debería ser hoy en día la escala de un "hogar de cultura", la ciudad, la metrópolis, el país, ... el mundo?

 

L. Kresevljakovic: "Justamente los lugares de los que hablamos, las reuniones de la comunidad local, son el lugar de encuentro de la comunidad local y global. Estoy estudiando la posibilidad de activar y redefinir los hogares de cultura a través de mi tesis como innovación social. Ezio Manzini, que trabajaba para crear innovaciones sociales, dijo: "En un mundo conectado, la experiencia local está influenciada en tiempo real para eventos que pueden ocurrir en cualquier lugar. En definitiva, lo local es nuestra interfaz con el mundo. Es un punto de vista concreto y un punto de acción "."

 

M. Serdarevic: "Diariamente somos testigos de cómo, independientemente de todo tipo de reuniones y comunicaciones virtuales, el verdadero lugar de encuentro físico todavía tiene un papel importante en la vida humana y la sociedad contemporánea. Calles, plazas, etc., son todavía llenos de gente y lo seguirán siendo durante mucho tiempo, como una necesidad y un estilo de vida. Por mucho que ahora, los centros comunitarios suelen llamarse con un nombre más moderno o fresco, como por ejemplo mediatecas, esto no es más que la definición de su uso principal, pero en el fondo, para mí sigue siendo el mismo. Al fin y al cabo, es un lugar donde los ciudadanos, o incluso dicho de forma más banal, los habitantes, se encuentran periódicamente para llevar a cabo sus actividades y así satisfacer sus necesidades, que a menudo se pueden decir secundarias o terciarias, pero que de hecho son las necesidades que nos hacen ser seres sociales. En la era de los canales de YouTube y medios similares, la adquisición de competencias y rutinas esenciales sigue teniendo lugar en el espacio físico y mediante la interacción directa.

Por mucho que sentimos que estamos informados y conectados a nivel de nuestro pueblo global, y, por ejemplo, despertar con la noticia de que un autobús volcó en Camboya, seguimos viviendo nuestra vida cotidiana en nuestro entorno que, es físico y real. Información sobre, por ejemplo, la tragedia del autobús realmente no ayuda a pasar el día que tenemos ante nosotros, pero tampoco nos impide que parte de nuestro tiempo la invertimos en diversos talleres, cursos y reuniones, o incluso lecturas de poesía, a escala local. Depende de nosotros, individualmente, qué necesidades y deseos tenemos, y si somos lo suficientemente proactivos, o en cambio, demasiado perezosos para embarcarnos en los procesos participativos. En Bosnia-Herzegovina faltan muchas cosas, pero, sobre todo, falta un deseo colectivo de cambiar, de mejorar o modernizarse. Los funcionarios de la administración del Estado, a las preguntas banales, responden con un: no es competencia mía, (...) creando así un vacío y dejando que todo suceda en un ámbito estrictamente controlado por las élites económicas y políticas, sin permitir, ni ofrecer la posibilidad a otros escenarios, donde los ciudadanos comunes podrían participar y enriquecer así sus vidas con actividades adicionales. Todo depende de nosotros y nuestros hábitos, y si no somos capaces de adquirir otros nuevos, todo queda relegado al factor económico que no está controlado por la mayoría de la población. "

Hoy en día, la cultura y la ciencia se difunden principalmente en los espacios digitales, ya sea en redes sociales, científicas, de información, o en la "nube". ¿Puede la arquitectura, unir de alguna forma este ecosistema digital con el medio físico local? ¿Podrías estar de acuerdo con la afirmación de que un “hogar de cultura” precisamente podría convertirse en una especie de “hub” que conecta estas dos realidades, la física y la digital?

 

L. Kresevljakovic: Justamente esta interfaz de palabras, que citaba antes, es muy importante. Porque realmente vivimos en un mundo conectado y, a través de los centros locales, podemos actuar de forma global. Tal como dijiste, el hogar de la cultura podría convertirse en un "hub", pero en un hub que conecta lo local con lo global, y lo real con lo virtual. "

 

M. Serdarevic: "La ciencia, la cultura y el progreso no se producen de forma espontánea, sino que son el resultado del trabajo duro, de la lucha de los individuos o grupos, que con gran esfuerzo están tratando de crear algo. Pero mientras la mayoría de la población esto lo daba por hecho y lo tomaba de forma superficial, sin participar, los hogares de cultura si fueron verdaderos centros de actividad o hubs en su tiempo. Pero, hoy estamos en la sociedad de transición, la que ha sufrido el trauma de la guerra y la destrucción, una destrucción no sólo física, sino también de la misma comunidad social, la transformación de la familia, el cambio de escala de valores, el populismo, y una especie de analfabetismo que es cada vez más presente en los medios. Todo esto es nuestra realidad, y tanto los sitios virtuales como los físicos y tangibles son espacios activos y deberían servir para estos grupos sociales y comunidades, y convertirse en incubadoras de integración social y una inspiración para este hombre alienado de hoy en día . "

¿En tu opinión, la difusión y la gestión de las “hogares de cultura” y sus actividades, deberían ser una competencia de las instituciones públicas o privadas? ¿Estarías de acuerdo que en el primer caso la cultura podría quedar en manos de las dinámicas políticas, mientras que, en el segundo caso, podría quedar en manos de las dinámicas económicas? ¿Cómo superar esta confrontación? ¿Cómo garantizar una gestión colectiva eficiente de un bien común como es la cultura?

L. Kresevljakovic: "Las instituciones estatales, de las que dependen los presupuestos de cultura, para su propia supervivencia no preguntan de manera crítica a la sociedad. Y el sector comercial, sin ningún escrúpulo, conquista todo lo que el dinero puede conquistar. Los hogares de la cultura debido a su mala situación financiera se encuentran indefensas a los intereses privados. Creo que este conflicto puede ser superado por una iniciativa civil que conecte estos dos sectores.

En el caso de la renovación activa de los centros culturales de BiH, los arquitectos deberían superar los marcos tradicionales y avanzar en una acción proactiva a lo largo del proceso. Es importante su papel en el fomento de la comunicación entre los diferentes participantes en el proceso de reconstrucción de su comunidad profesional y de las asociaciones, las organizaciones locales de la sociedad civil, las asociaciones que se ocupan de las iniciativas espaciales, activistas culturales, medios de comunicación, autoridades locales y las organizaciones políticas locales. Los arquitectos deben ser incluidos en el panorama más amplio de cambio social, más allá de los límites de la viabilidad económica, las actividades de arquitectura y diseño, desde un esfuerzo conjunto en el que el proceso de diseño arquitectónico se ha de extender entre los diferentes participantes y los diferentes campos profesionales. Y cuando presenten una idea, esta debería ser inteligible para la comunidad más amplia, por lo que los futuros usuarios puedan explorar y hacer comentarios y sugerencias.

Este proceso de reconstrucción, en el que todos los agentes participan activamente, en sí mismo refuerza los vínculos entre las personas, desarrolla un sentimiento de pertenencia a la comunidad y el espacio, y obliga a una mayor cooperación. La creación de este entorno es un paso importante hacia el pleno cumplimiento de la tarea, que no sólo está en el dominio del material, el mundo físico, sino también en el ámbito social de la comunidad local. El concepto arquitectónico de los centros culturales, fruto del proceso de co-diseño, puede contribuir significativamente a la renovación del papel y la importancia de los hogares de la cultura.

La renovación contemporánea del papel y de la importancia de los hogares de la cultura es un proceso complejo, con muchos participantes. Se prevé que muchos cambien la posición pasiva actual en una actitud proactiva. Esto se aplica a los arquitectos, pero también a la población local. Su compromiso conjunto es necesario para restablecer la importancia de los hogares de la cultura. Los arquitectos deben reconocer su papel en una imagen más amplia de la sociedad para salir de las prácticas habituales que no son capaces de ofrecer soluciones adecuadas. Deben reconocer sus potenciales creativos no sólo en el ámbito de áreas de especialización reducida del diseño arquitectónico, sino también como creadores de eventos sociales. La comunidad local, en cambio, debe reconocer los problemas de la situación en que se encuentran los hogares de la cultura, para invertir todos sus recursos en el proceso de reconstrucción. Después de la Segunda Guerra Mundial, activar la comunidad local en la construcción de viviendas fue un imperativo creado por el gobernante Partido Comunista de Yugoslavia. Ahora tal imperativo no existe, pero es necesario para crear la toma de conciencia, de cada una de las comunidades locales individuales, de la importancia de la participación e iniciar el proceso de reconstrucción de los hogares de cultura, ya sean la comunidad local, el gobierno local, arquitectos, trabajadores de la cultura o similares. Esta es una tarea mucho más seria y compleja que la reconstrucción, por ejemplo, del techo colapsado de un edificio. La renovación contemporánea de los centros culturales debe ir hacia un cambio social con métodos de co-diseño. "

 

M. Serdarevic: "Público y privado en BiH se reduce a un nivel donde el privado se sagrado e inviolable, y el público es de todos, y, por tanto, sujeto a destrucción, apropiación indebida y devaluación. Independientemente de ello, la comunidad social como garante de la democracia y la justicia debería gestionar, mediante políticas que deberían promover el trabajo de las asociaciones y grupos de ciudadanos interesados, programas destinados a grupos específicos de ciudadanos, ofreciéndoles así una alternativa, de dedicar así, de forma proactiva, por ejemplo, un par de horas de su tiempo libre. Por otra parte, en BiH, la cuestión del espacio o la financiación del sector de las ONG o de actividades culturales se ha dejado a la política y las donaciones, mientras que de otro modo podrían generar fondos propios y llegar a ser proyectos sostenibles por sí mismos. "

 

Esta conversación a tres bandas, donde se ha hablado de co-diseño, de la gestión de los bienes comunes y de la convivencia de los espacios públicos virtuales y físicos, me ha hecho volver mentalmente varios años atrás, y recordar dos debates similares, mantenidos también en Sarajevo. Por un lado, me ha hecho rememorar las conversaciones mantenidas en 2013 con Belinda Tato de Ecosistema Urbano, de Madrid, tras su presentación en el festival de arquitectura "Dani Arhitekture 2013" de su proyecto de diseño participativo Dreamhamar, por la plaza Hamar en Noruega, donde ya se habían puesto en práctica muchos de los puntos relacionados con co-diseño y procesos de participación hablados aquí. Por otra parte, me ha hecho recordar mi participación en el mismo festival, hablando sobre los espacios comunes híbridos físico-digitales, donde también se trataban, desde un punto de vista más teórico, los temas del rol del arquitecto, del rol de los espacios públicos en la sociedad red, o la viabilidad de los procesos de diseño y gestión participativos, tanto en el caso de los espacios colectivos digitales como de los espacios públicos físicos, y de unos hipotéticos espacios comunes híbridos.

 

Este lapso de tiempo, de casi cinco años, entre el festival "Dani Arhitekture 2013" y esta conversación sobre la exposición "Hogares de Cultura", demuestra que en Sarajevo ya BiH, el debate, sobre la generación, gestión y el uso de los espacios comunes, así como el debate sobre el rol de los arquitectos en la sociedad contemporánea, o la necesidad de los procesos participativos como garantía de éxito del proyecto, sigue plenamente vigente. Y también, que es un debate que sigue nutriéndose de nuevas voces que claman por un cambio radical, desde los procesos de diseño hasta la gestión y utilización de los espacios y equipamientos públicos, a través de procesos participativos.

 

Relja Ferusic Manusev, arquitecto. Corresponsal del COAC en Sarajevo, Bosnia y Herzegovina. Noviembre 2017

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L'arquiPia. Arquitectura atenta al context i a la sostenibilitat, a Torí

© Aina Peréz, corresponsal del COAC a Torí

Una de les coses que més m'agrada de la zona on visc a Torí és que cada dia quan surto de casa passo per l'edifici de la Facultat de Biotecnologia, un dels edificis més notables de l'arquitectura torinesa dels últims anys, projecte de l'arquitecte més interessant que té la ciutat en l'actualitat: Luciano Pia.

Pia (1960) és un arquitecte piemontès que ha treballat durant molts anys en importants projectes de rehabilitació d'edificis històrics i que ha operat des de París, des del 1990 al 2000, en un despatx d'arquitectura en col·laboració amb Andrea Bruno. L'any 2000 torna a Torí i decideix obrir el seu despatx professional en aquesta ciutat col·laborant amb DE-GA S.p.a, una important empresa constructora. Això li permet treballar en un microcontext de proximitat que és el que coneix bé i on aconsegueix entendre millor com ha de projectar les seves obres.

Un arquitecte, que segons comentava ell mateix en una entrevista a la revista Casabella, treballa en una habitació sense finestres per concentrar-se i construeix molt poc perquè, en paraules textuals: “Aconsegueixo seguir només una obra cada vegada. M'ocupo del desenvolupament del projecte i de la direcció d'obra personalment, des del principi fins al final. Es un límit que tinc”.

I tot i així, és l'arquitecte més conegut i reconegut pels habitants de la ciutat de Torí.

Segons les dades de la primera edició d'OpenHouse*(1) realitzada a Torí el segon cap de setmana de juny d'aquest any, els edificis contemporanis més visitats han estat algunes de les seves obres: la “Casa Hollywood” (944 visites) i el “25 verde” (900 visites). Les llargues cues per veure aquestes obres i moltes altres, amb un total de 111 edificis oberts tan públics com privats i un resultat final de 38.000 visites, ha significat un gran èxit per l'organització que no esperava aquesta acollida. Però sobretot i molt important, ha manifestat que els habitants de la ciutat estan molt interessats en la seva arquitectura enviant un missatge que hauria de ser molt clar a les autoritats locals: la ciutadania es preocupa pel patrimoni de la ciutat i per la nova construcció que s'hi realitza.

Però tornem a l'arquitectura de Pia, que en el seu currículum defineix la seva “formulació de la poètica” a partir de nou punts:

  1. Atenció i respecte al Context (Genius Loci). Reconèixer que cada lloc és especial i per tant conservar-ho i comunicar-ho en les seves característiques formals.
  2. Primer de tot les funcions, després el projecte. L'organització de les activitats com a esquema primari sobre el qual es modela l'arquitectura. És a dir, l'arquitectura al servei d'allò que passa al seu interior.
  3. Donar valor a la relació entre l'interior i l'exterior. Aconseguir que la relació “dins-fora” sigui fluida, poètica, suggestiva i rica de possibilitats expressives, i sobretot que qui visqui dins l'edifici així ho senti.
  4. El projecte del “verd”. La vegetació s'ha de pensar de forma orgànica junt amb l'ús de l'edifici i ha de ser organitzada segons la seva estacionalitat i natura.
  5. La sostenibilitat del projecte com a valor primari. El millor resultat possible amb el mínim impacte. Sostenibilitat des del punt de vista energètic, ambiental, econòmic i d'ús per part dels habitants.
  6. Construir dins el construït. Es persegueix el principi de “retrofit”, és a dir la intervenció en espais edificats utilitzant-ne el millor possible les estructures portants, els forjats i les cobertes per optimitzar els costos de construcció i disminuir la pressió sobre els terrenys lliures.
  7. Entendre i viure els materials. Utilitzar i interpretar els materials tal com són sense disfressar-los o dissimular-los i acceptant la seva degradació amb el pas del temps.
  8. Els detalls no són un detall sinó el projecte. La precisió del projecte no és un detall.
  9. La reducció de la distància entre el projecte inicial i la seva realització finalitzada. Tot i els potents mitjans de representació digital, tendir a eliminar la distància entre aquesta representació i el resultat construït.

A més a més afegeix un últim “no punt” on diu que si després de seguir totes aquestes regles el resultat que s'obté és terrible, s'ha de tornar a començar des del principi, posar-se en discussió i canviar d'opinió si un veu que la solució no és la correcta.

Un cop llegits els seus principis per afrontar la realització d'un projecte, entenem perquè cada un d'ells té un resultat formal tan diferent. En el cas de la Facultat de Biotecnologia, de la qual parlava al principi de l'article, ens trobem amb un edifici institucional de volums nets i amb gran contrast entre els plens i els buits, entre el formigó autocompactant vist i les grans superfícies de vidre que donen pas a patis interns arbrats. Quan veus l'edifici tens la sensació que tot està allà on toca i que cada espai està molt ben definit.

Emplaçat molt a prop d'aquest edifici en el mateix barri, trobem un altre projecte molt diferent, el conjunt residencial “25 verd”. En aquest cas els habitatges són envaïts literalment pel verd i sembla que la intenció sigui recrear un trosset de l'històric parc del Valentino, situat molt a prop del complex de cases. Habitatges dins un parc, dins la ciutat dels parcs*(2). El conjunt evoca la fantasiosa idea de viure a la casa de l'arbre que tots hem somiat de petits.

L'atenció al context de cada edifici i al verd, les façanes tractades d'una forma molt escultòrica sempre amb importants jocs de llums i ombres, de plens i buits, el material que sembla viu, tot això fa que ens adonem que les dues obres tenen en realitat més en comú del que sembla, malgrat el seu aspecte formal molt diferent.

Cada edifici construït és tractat amb molta cura i amb dedicació total per part de l'arquitecte, que seguint el seu propi procés de projecció, dota d'una imatge única i característica cadascuna de les seves obres. D'aquesta manera aconsegueix que els habitants i usuaris de l'edifici, i de forma més general els ciutadans de Torí, es facin seus aquests projectes i se'n sentin en certa manera orgullosos. I aquesta crec que és la gran conquesta de l'arquitectura de Pia.

Aina Pérez i Verge. Corresponsal del COAC a Torí, Itàlia. novembre 2017.

Notes:

*(1) Openhouse neix a Londres el 1992 obrint al públic durant un cap de setmana a l'any edificis tan públics com privats de forma gratuïta. L'edició d'aquest 2017 a la ciutat de Torí ha estat la primera.

*(2) Torí compta amb 19.569.000m2 aproximats de verd. Això suposa uns 21,93m2 de verd aproximat per habitant segons l'ajuntament de la ciutat. Barcelona, segons un article de l'Ara publicat aquest any, compta amb 6m2 d'espai verd per habitant, 11,6m2 si es compten els arbres.

La Unió Europea recomana que les ciutats tinguin entre 15 i 20m2 de verd per habitant.

 

Referències:

Il Barone Rampante. Calvino a Torino. Casabella 822 (2013) pàg.75-85

http://www.lucianopia.it/

http://openhousetorino.it/

https://www.youtube.com/watch?v=axWPowAVh-g (25 verde)

https://www.youtube.com/watch?v=5O1bBoVg-88 (entrevista a l'arquitecte)

http://www.architetto.info/news/green-building/la-scuola-di-biotecnologie-di-torino-di-luciano-pia/(Facultat de Biotecnologia)

http://www.comune.torino.it/verdepubblico/patrimonioverde/verdeto/numeri.shtml

https://www.ara.cat/societat/Barcelona-guanyara-espais-verds-2030_0_1796220486.html

 

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Llocs de cultura i processos participatius a Sarajevo

Foto/Domovi Kulture, Autor: Lejla Kresevljakovic © Fotògraf: Anida Kreco

Aquest octubre, Sarajevo ha acollit el congrés internacional “Importance of the Place” focalitzat sobre el tema “ciutats i paisatges culturals: entre el reconeixement, la preservació i l'ús”. El congrés es centra principalment en llocs històrics antics i la seva preservació. Es per això que hi destaca, com un rara avis, l’exposició “Domovi Kulture” (centres culturals), de l’arquitecta Lejla Kresevljakovic, inaugurada en el marc del mateix congrés. És el resultat d’una investigació sobre els edificis projectats i construïts com centres culturals de l’època socialista, i que avui en dia han quedat principalment en desús. En paraules de l’autora de l’exposició, "La major part de l'antic centre cultural a BiH ha estat restaurat per l'administració local, els danys de la guerra han estat reparats i els edificis estan en un estat d'usabilitat. No obstant això, el paper i la importància que alguna vegada van tenir no han estat renovats".

El nom de l’exposició “Domovi Kulture”, és com es denominen en l’idioma Bosni els equipaments destinats a l’acollida i la promoció d’activitats culturals, i que es tradueix literalment com “llars de cultura”, que a Catalunya habitualment denominem com “centres culturals”, “casals” i etc. Donat que l’exposició de les “llars de cultura” forma part del congrés centrat en “Llocs”, amb majúscula, potser podríem parlar de “Llocs de Cultura”, on és justament la Cultura, també amb majúscula, la que fa possible la seva classificació de “Lloc”, seguint el raonament de Marc Augé sobre els “No-llocs”.

És una exposició diferent a la resta de temes tractats al congrés, que parla d’uns equipaments molt específics i d’unes arquitectures molt marcades per un ús i una època, no tan llunyans en el temps. Aquí no hi ha ruïnes antigues, ni edificis protegits per la UNESCO. És un recull d’edificis anònims, sense cap pretensió mes enllà d’acollir de la millor forma possible l’ús pel qual van ser destinats: generació i promoció d’activitats culturals. Donar un servei públic que, malauradament, no acostuma a ser considerat de primera necessitat, però que en la realitat és bàsic per una societat avançada, crítica, madura i democràtica. I justament per això, són també “Llocs”, per definició, i en aquest cas, “Llocs” als quals pot ser no s’ha prestat l’atenció adequada. 

Però, el que trobo més interessant, és que es tracta d’un ús que en l’era de la societat xarxa, basada en els espais digitals, ha evolucionat molt respecte a l’època per la que van estar pensats aquests “Llocs de Cultura”. La transformació de la activitat ha estat radical: els límits entre l’escala local i global s’han esborrat cap aquella escala “glocal” de Manuel Castells; la diferenciació entre els productors i els consumidors de continguts ha desaparegut, on tots ens hem convertit en “prosumidors”; i la línia entre l’espai físic i digital s’ha esborrat, creant uns incipients “espais híbrids”, que funcionen transversalment a les escales tradicionals, on el coneixement es genera en xarxa, i ens porta cap a la “intel·ligència col·lectiva” de Pierre Levy. És per això que parlar avui en dia de “llocs de cultura” implica canviar de paradigma, i es per això, que aquesta exposició ha cridat la meva atenció.

És en aquest sentit que l’ exposició no només cataloga els espais dels llocs de cultura, sinó que també proposa el rol dels arquitectes en la seva rehabilitació i reactivació, a través de dinamitzar la participació ciutadana, o en paraules de l’autora, el disseny participatiu: "En el model de gestió contemporània, es posa l'accent en  la iniciativa social i la participació a través del sector de la societat civil, que està clarament subdesenvolupat per iniciar activitats en l'àrea dels centres culturals. Aquesta investigació té com a objectiu cridar l'atenció sobre el paper que els arquitectes, com a membres responsables de la comunitat poden tenir cap a l'activació de la comunitat local pels mètodes de disseny participatiu." També m’ha interessat comprovar com es pot analitzar aquest tema a una societat, la de Bòsnia i Hercegovina, igual de contemporània, però més deprimida, que les societats d’Europa occidental. Segueix viable proposar el fet cultural com una necessitat de primer ordre? Segueix vigent canalitzar-ho a través de les llars de cultura? Com haurien de ser aquests en la societat actual?

Per intentar respondre a aquestes i altres preguntes, he mantingut una conversa amb Lejla Kresevljakovic, arquitecta i autora de l’exposició “Domovi Kulture”, i amb Muhamed Serdarevic, també col·lega de la professió, qui m’ha posat en contacte amb l’autora de l’exposició. Hem conversat, i m’han donat el seu parer, sobre una sèrie de reflexions que els hi he plantejat en relació a les “llars de cultura” i el paper en general de l’arquitecte i l’arquitectura en la societat actual.

Identificar un problema és sempre el primer pas cap a la seva resolució. Entenc que l’exposició “Domovi Kulture” és aquest primer pas. Però, un cop identificat el problema, ara què? Quins haurien de ser els següents passos?  

L. Kresevljakovic: “Per a la rehabilitació de la funció i importància dels centres culturals, es requereix una idea gairebé revolucionària, o una idea que surti del marc i de la pràctica actual. Hi ha un munt de problemes a la vida diària de les persones que no poden ser resolts amb mètodes i procediments de les autoritats i de l'administració, o qualsevol de les formes comercials ja coneguts. Davant d'aquests problemes, hi ha solucions que trenquen models tradicionals i ofereixen noves. Les noves solucions van més enllà de la tradicional dicotomia en termes de privat-públic, local-global, els consumidors-productors, necessitat-desig, etc., ja que la majoria d'aquestes solucions són al mateix temps el caràcter local i global, ja que els consumidors en la majoria dels casos són també els productors, i ja que les necessitats i desitjos personals en molts casos són coincidents. Hi ha d’haver una ruptura amb els fluxos habituals, és a dir, amb modes de pensament que es consideren "normals".

M. Serdarevic: “És important que algú (Leija Kresevljakovic) d'aquesta manera toqui el tema, i més, dins d'aquesta conferència on el patrimoni cultural es considera només edificis i espais "antics". Per això és interessant observar també els espais que expliquen el passat recent, ja que ara encara podem fer alguna cosa i revitalitzar-los o equipar-los per a propòsits similars i complementaris, abans que es converteixin en ruïnes, ja prou antigues com per començar a tractar-los com a tals, on podrien estar interessades ja algunes de les pròximes generacions.”

I com afecta aquest fet a l’arquitecte? Quin és aquest nou rol que hem de jugar? Últimament es parla molt de “facilitadors”, però com definiries tu aquest nou rol?

L. Kresevljakovic:Si des d’aquest punt de vista ens fixem en la pràctica arquitectònica habitual, podem dir que el seu compromís amb la reconstrucció de les llars de cultura estava a l'àrea de resolució de problemes de caire físic, especialitzats i professionals, però sense un examen crític sobre una concepció espacial que és obsoleta, sense participació en l'estudi de necessitats reals i preferències de la comunitat local. Perquè les activitats arquitectòniques siguin part de la renovació activa de les llars de la cultura, cal sortir d'aquests marcs actuals. Hi ha diverses condicions que s'han de complir, és a dir: (1) els dissenyadors s'han d'incloure en una imatge més àmplia del canvi social, més enllà de la viabilitat econòmica, (2) que el disseny s'entengui com un esforç col·lectiu,  on el procés de disseny estigui molt estès entre els diferents grups d'interès i diverses àrees d'experts, i (3) que les idees proposades siguin presentades, i testades per part dels futurs usuaris, és a dir, provades de forma empírica i orientada a l'usuari en la fase inicial del disseny. De fet, totes aquestes característiques són pròpies del co-disseny. Considero que la pràctica del disseny arquitectònic amb mètodes de co-disseny ens pot fer sortir del marc actual, i contribuir al canvi social.”

“La primera característica esmentada de co-disseny, promou una diferència amb l'esperit consumista de gran part de productes de disseny que tenim l'oportunitat de veure a la vida quotidiana. Vivim en una societat de consum dominant. El disseny que coneixem és egocèntric, impulsat pel desig d'expressar el poder, la dominació, l'èxit i la fama. En una societat impulsada per l'ego, els diners i els beneficis, les estrelles arquitectòniques són un fenomen molt esperat. Tanmateix, aquest tipus de disseny no contribueix al canvi social, sinó que determina la situació existent en la societat. Per tant, hem de distingir aquest tipus de disseny d’un co-disseny impulsat per les idees oposades, la idea d'igualtat, de participació, més enllà dels límits de la viabilitat econòmica. La intenció o esforç final és que la intervenció d'un dissenyador creixi o sigui part d'un canvi social. Aquest objectiu es pot aconseguir a través del propi procés de disseny i a través de l'aspiració cap als resultats del disseny humanitari, socialment i culturalment sostenible. Així, des de mitjans del segle passat, han funcionat arquitectes com Cristopher Alexander, Hemanna Hertzberger, etc. a un contemporani com Alejandra Aravena, Janne Gang, etc.”

Quan parlem de co-disseny, o disseny cooperatiu, consideres que és tota la comunitat la que hi ha de participar, o ens centrem en els dissenyadors professionals i els usuaris finals, com una simplificació del problema de la gestió dels processos participatius?

L. Kresevljakovic: “En el procés de presa de decisions sobre l'espai, no només han de participar els diferents professionals de la pràctica, sinó tota la població local com a futurs usuaris de l'espai. Co-disseny en un sentit ampli es refereix a la creativitat dels dissenyadors i també de les persones que no estan formades com dissenyadors, per a treballar junts en el procés creatiu. Poden ser persones pertanyents a categories especials, poden ser futurs usuaris, poden ser experts de diferents camps, etc. Per tant, el co-disseny és un tipus especial de co-creació. El punt de partida en el procés de disseny, on es defineix la tasca,  és el moment més important per a la inclusió d'un major nombre de participants en la discussió, perquè és en aquest moment del procés de co-disseny on s’obtenen els millors resultats. De fet, aquest és el següent pas! La inclusió del major nombre de participants en el procés de definició del projecte per la reconstrucció i activació de les llars de cultura.”

Consideres que una “llar de cultura” tal com ho coneixem, encara continua vigent i te el seu lloc en la societat i context actuals, o bé, s’hauria de repensar d’alguna forma. De fet, son tan sols necessàries encara les “llars de cultura”?

L. Kresevljakovic: Les llars de cultura com les que hi havia a BiH encara existeixen, però a BiH ja no. N’hi ha a tota Europa. Barcelona, ​​per exemple, té una gran xarxa d'aquests centres socials. La qüestió és si els centres culturals es necessiten a la societat actual de BiH. El nou sistema de valors a la societat de  Bòsnia i Hercegovina, que es basa en punts de vista individualistes i materialistes de la realitat, és omnipresent i esborra la idea de l'acció col·lectiva. La majoria de les persones pensaran sobre on portar els nens a un curs d'informàtica o d'un idioma estranger, com pagar-ho, i etc., però gairebé ningú pensarà en intentar organitzar una cosa així a nivell de la comunitat local, per als nens del veïnat, per l'àrea de l'escola local, o a l’àmbit d’una llar de cultura que encara existeix. D'aquesta manera es dissol la societat, que és evident a tot arreu.”

“Les persones se separen per diversos motius, però hi ha molt pocs llocs que són justament punts de connexió, llocs de reunió, llocs on es poden trobar i conèixer persones que d'una altra manera mai s'haguessin conegut. Per a la comunitat local, no tenir aquest lloc de trobada significa no tenir el punt d’inflexió, el lloc on es reuniran els rics i els pobres,  els formats i els sense formació, on, en definitiva, les persones podran reunir-se i ajudar-se mútuament. Les oportunitats són enormes. Cal reflexionar sobre quina és la llar de cultura contemporània, tenir una visió diferent de la realitat, i prendre la iniciativa.”

M. Serdarevic:“Si acceptem que l'arquitectura d'una determinada manera és el mirall del temps en què sorgeix, llavors les llars de la cultura i els continguts que ofereixen, són el mirall de la realitat del temps en què vivim. Cito els exemples que he vist a Barcelona, i es pot dir que és més digitalitzada que Sarajevo i amb un nombre creixent d'usuaris d'Internet i una forma de vida més ràpida, però on encara existeixen biblioteques i centres culturals basats en associacions de veïns. Són exemples que he visitat i usat diverses vegades, com ara la instal·lació situada just a sobre de la biblioteca "Joan Margall" en Sant Gervasi, recentment inaugurada, on per exemple, les classes de ioga, o cursos i activitats vàries segueixen tenint lloc i atractiu, tant per a visitants com per a usuaris locals. O simplement, segueix vigent com lloc de reunió del veïnat.”

Són per tant, les llars de cultura centres claus per la cohesió social a escala local?

L. Kresevljakovic:Els centres culturals eren factors cohesius de les comunitats locals. La majoria de les definicions de veïnat inclouen dos aspectes generals, el físic i el social, i centres culturals que reuneixen els dos aspectes. Van ser llocs de trobada, llocs en els quals les comunitats locals s’identificaven com parts d’una comunitat més gran, la de la ciutat, on es van assentar, i desenvolupar la seva identitat. Conscients de les seves pròpies necessitats culturals, els membres d’aquestes agrupacions locals han de passar de l’actitud de rebre un servei, a l’actitud de co-gestinar i co-produccir, en el procés de renovació de les llars de la cultura. La inclusió de les comunitats locals en el procés de reconstrucció significaria la integració social, l'enfortiment de la seva relació amb els centres de la comunitat, desenvolupant un sentit de pertinença, que prometi una major probabilitat que la llar de cultura s'implementi i sigui acceptada per la comunitat local, i esdevingui el centre social i cultural de la comunitat local.”

Com un lloc físic i local (en aquest cas una “llar de cultura”, però seria aplicable a qualsevol artefacte arquitectònic), s’integra en una societat global i deslocalitzada com l’actual? I concretament, quina influència té aquest fet social sobre la cultura i la seva difusió? Finalment, quina hauria de ser avui en dia l’escala d’una “llar de cultura”, la ciutat, la metròpolis, el país, ...el món?

L. Kresevljakovic:Justament els llocs dels quals parlem, les reunions de la comunitat local, són el lloc de trobada de la comunitat local i global. Estic estudiant la possibilitat d'activar i redefinir les llars de cultura a través de la meva tesi com a innovació social. Ezio Manzini, que treballava per crear innovacions socials, va dir: “En un món connectat, l'experiència local està influenciada en temps real per esdeveniments que poden ocórrer en qualsevol lloc. En definitiva, allò local és la nostra interfície amb el món. És un punt de vista concret i un punt d'acció”.”

M. Serdarevic:Diàriament som testimonis de com, independentment de tot tipus de reunions i comunicacions virtuals, el veritable lloc de trobada física encara té un paper important en la vida humana i la societat contemporània. Carrers, places, etc., són encara plens de gent i ho continuaran sent durant molt de temps, com una necessitat i un estil de vida. Per molt que ara, els centres comunitaris acostumen a anomenar-se amb un nom més modern o fresc, com per exemple mediateques, això no és més que la definició del seu ús principal, però en el fons, per mi continua sent el mateix. Al cap i a la fi, és un lloc on els ciutadans, o inclús dit de forma més banal, els habitants, es troben periòdicament per dur a terme les seves activitats i així satisfer les seves necessitats, que sovint es poden dir secundàries o terciàries, però que de fet són les necessitats que ens fan ser éssers socials. En l'era dels canals de YouTube i mitjans similars, l’adquisició de competències i rutines essencials continua tenint lloc en l'espai físic i mitjançant la interacció directa.

Per molt que sentim que estem informats i connectats a nivell de nostre poble global, i per exemple, despertar amb la notícia que un autobús va bolcar a Cambodja, continuem vivint la nostra vida quotidiana en el nostre entorn que, és físic i real. Informació sobre, per exemple, la tragèdia de l'autobús realment no ajuda a passar el dia que tenim davant de nosaltres, però tampoc ens impedeix que part del nostre temps l’invertim en diversos tallers, cursos i reunions, o fins i tot lectures de poesia, a escala local. Depèn de nosaltres, individualment, quines necessitats i desitjos tenim, i si som prou proactius, o en canvi, massa mandrosos per embarcar-nos en el processos participatius. A Bòsnia i Hercegovina falten moltes coses, però sobretot, falta un desig col·lectiu de canviar, de millorar o modernitzar-se. Els funcionaris de l'administració de l'Estat, a les preguntes banals, responen amb un: no és competència meva, (...) creant així un buit i deixant que tot succeeixi en un àmbit estrictament controlat per les elits econòmiques i polítiques, sense permetre, ni oferir la possibilitat a altres escenaris, on els ciutadans comuns podrien participar i enriquir així les seves vides amb activitats addicionals. Tot depèn de nosaltres i els nostres hàbits, i si no som capaços d’adquirir-ne de nous, tot queda relegat al factor econòmic que no està controlat per la majoria de la població.”

Avui en dia, la cultura i la ciència es difonen principalment als espais digitals, ja sigui en xarxes socials, científiques, d’informació, o en el “núvol”. Pot l’arquitectura, unir d’alguna forma aquest ecosistema digital amb el medi físic local? Podries estar d’acord amb l’afirmació que una “llar de cultura” precisament podria esdevenir una espècie de “hub” que connecta aquestes dues realitats, la física i la digital?

L. Kresevljakovic: Justament aquesta interfície de paraules, que citava abans, és molt important. Perquè realment vivim en un món connectat i, a través dels centres locals, podem actuar de forma global. Tal com vas dir, la llar de la cultura podria convertir-se en un "hub", però en un hub que connecta allò local amb allò global, i allò real amb allò virtual.”

M. Serdarevic:La ciència, la cultura i el progrés no es produeixen de forma espontània sinó que són el resultat del treball dur, de la lluita dels individus o grups, que amb gran esforç estan tractant de crear alguna cosa. Però mentre la majoria de la població això ho donava per fet i s’ho prenia de forma superficial, sense participar-hi, les llars de cultura si van ser veritables centres d’activitat o hubs en el seu temps. Però, avui estem a la societat de transició, la que ha patit el trauma de la guerra i la destrucció, una destrucció  no només física, sinó també de la mateixa comunitat social, la transformació de la família, el canvi d’escala de valors, el populisme, i una mena de analfabetisme que és cada vegada més present en els mitjans. Tot això és la nostra realitat, i tant els llocs virtuals com els físics i tangibles són espais actius i haurien de servir per aquests grups socials i comunitats, i esdevenir incubadores d’integració social i una inspiració per aquest home alienat d’avui en dia.” 

Segons el teu parer, la difusió i la gestió de les “llars de cultura” i les seves activitats, haurien de ser una competència de les institucions públiques o privades? Estaries d’acord que en el primer cas la cultura podria quedar en mans de les dinàmiques polítiques, mentre que en el segon cas, podria quedar en mans de les dinàmiques econòmiques? Com superar aquesta confrontació? Com garantir una gestió col·lectiva eficient d’un be comú com és la cultura?

L. Kresevljakovic: Les institucions estatals, de les que depenen els pressupostos de cultura, per a la seva pròpia supervivència no pregunten de manera crítica a la societat. I el sector comercial, sense cap escrúpol, conquesta tot el que els diners poden conquerir. Les llars de la cultura degut a la seva mala situació financera est troben indefenses als interessos privats. Crec que aquest conflicte pot ser superat per una iniciativa civil que connecti aquests dos sectors.

En el cas de la renovació activa dels centres culturals de BiH, els arquitectes haurien de superar els marcs tradicionals i avançar en una acció proactiva al llarg del procés. És important el seu paper en el foment de la comunicació entre els diferents participants en el procés de reconstrucció de la seva comunitat professional i de les associacions, les organitzacions locals de la societat civil, les associacions que s'ocupen de les iniciatives espacials, activistes culturals, mitjans de comunicació, autoritats locals i les organitzacions polítiques locals. Els arquitectes han de ser inclosos en el panorama més ampli de canvi social, més enllà dels límits de la viabilitat econòmica, les activitats d'arquitectura i disseny, des de un esforç conjunt en el qual el procés de disseny arquitectònic s’ha d’estendre entre els diferents participants i els diferents camps professionals. I quan presentin una idea, aquesta hauria de ser intel·ligible per la comunitat més àmplia, de manera que els futurs usuaris puguin explorar i fer comentaris i suggeriments.

Aquest procés de reconstrucció, en el qual tots els agents participen activament, en si mateix reforça els vincles entre les persones, desenvolupa un sentiment de pertinença a la comunitat i l'espai, i obliga a una major cooperació. La creació d'aquest entorn és un pas important cap al ple compliment de la tasca, que no només està en el domini del material, el món físic, sinó també en l'àmbit social de la comunitat local. El concepte arquitectònic dels centres culturals, fruit del procés de co-disseny, pot contribuir significativament a la renovació del paper i la importància de les llars de la cultura.

La renovació contemporània del paper i de la importància de les llars de la cultura és un procés complex, amb molts participants. Es preveu que molts canviïn la posició passiva actual en una actitud proactiva. Això s'aplica als arquitectes, però també a la població local. El seu compromís conjunt és necessari per restablir la importància de les llars de la cultura. Els arquitectes han de reconèixer el seu paper en una imatge més àmplia de la societat per sortir de les pràctiques habituals que no són capaces d'oferir solucions adequades. Han de reconèixer els seus potencials creatius no només en l'àmbit d'àrees d'especialització reduïda del disseny arquitectònic, sinó també com a creadors d'esdeveniments socials. La comunitat local, en canvi, ha de reconèixer els problemes de la situació en què es troben les llars de la cultura, per invertir tots els seus recursos en el procés de reconstrucció. Després de la Segona Guerra Mundial, activar la comunitat local en la construcció d'habitatges va ser un imperatiu creat pel governant Partit Comunista de Iugoslàvia. Ara tal imperatiu no existeix, però és necessari per crear la presa de consciència, de cadascuna de les comunitats locals individuals, de la importància de la participació i iniciar el procés de reconstrucció de les llars de cultura, ja siguin la comunitat local, el govern local, arquitectes, treballadors de la cultura o similars. Aquesta és una tasca molt més seriosa i complexa que la reconstrucció, per exemple, del sostre col·lapsat d’un edifici. La renovació contemporània dels centres culturals ha d'anar cap a un canvi social amb mètodes de co-disseny.”

M. Serdarevic:Públic i privat a BiH es redueix a un nivell on el privat es sagrat i inviolable, i el públic és de tots, i per tant, subjecte a destrucció, apropiació indeguda i devaluació. Independentment d'això, la comunitat social com a garant de la democràcia i la justícia ho hauria de gestionar, mitjançant polítiques que haurien de promoure el treball de les associacions i grups de ciutadans interessats, programes destinats a grups específics de ciutadans, oferint-los així una alternativa, de dedicar-ne així, de forma proactiva, per exemple, un parell d'hores del seu temps lliure. D'altra banda, a BiH, la qüestió de l'espai o el finançament del sector de les ONG o d’activitats culturals s'ha deixat a la política i les donacions, mentre que d’altra manera podrien generar fons propis i arribar a ser projectes sostenibles per si mateixos.”

Aquesta conversa a tres bandes, on s’ha parlat de co-disseny, de la gestió dels bens comuns i de la convivència dels espais públics virtuals i físics, m’ha fet tornar mentalment uns quants anys enrere, i recordar dos debats similars, mantinguts també a Sarajevo. Per una banda, m’ha fet rememorar la les converses mantingudes  l’any 2013 amb Belinda Tato d’Ecosistema Urbano, de Madrid, després de la seva presentació al festival d’arquitectura “Dani Arhitekture 2013” del seu projecte de disseny participatiu Dreamhamar, per la plaça Hamar a Noruega, on ja s’havien posat en pràctica molts dels punts relacionats amb co-disseny i processos de participació parlats aquí. Per altra banda, m’ha fet recordar la meva participació al mateix festival, parlant sobre els espais comuns híbrids físico-digitals, on també es tractaven, des d’un punt de vista més teòric, els temes del rol de l’arquitecte, del rol dels espais públics a la societat xarxa, o la viabilitat dels processos de disseny i gestió participatius, tant en el cas dels espais col·lectius digitals com dels espais públics físics, i d’uns hipotètics espais comuns híbrids.

Aquest lapsus de temps, de quasi cinc anys, entre el festival “Dani Arhitekture 2013” i aquesta conversa sobre l’exposició “Llars de Cultura”, demostra que a Sarajevo i a BiH, el debat, sobre la generació, la gestió i l’ús dels espais comuns, així com el debat sobre el rol dels arquitectes en la societat contemporània, o la necessitat dels processos participatius com garantia d’èxit del projecte, segueix plenament vigent. I també, que és un debat que es continua nodrint de noves veus que clamen per un canvi radical, des dels processos de disseny fins la gestió i utilització dels espais i equipaments públics, a través de processos participatius.

Relja Ferusic Manusev, arquitecte. Corresponsal del COAC a Sarajevo, Bòsnia i Hercegovina. Novembre 2017

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Cultura de Vučedol, Croàcia. La cultura más antigua de Europa y su museo

© Javier Luri

En el extremo este de Croacia, en las proximidades de la ciudad de Vukovar y sobre una plataforma de 20 metros de elevación que domina el margen derecho del Danubio está ubicado uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de Europa.

En la edad del bronce, entre los años 3300 y 2500 A. C. este lugar fue el centro de la cultura de Vučedol, una civilización prehistórica que nació tras la llegada de las poblaciones indoeuropeas, coetánea de las civilizaciones egipcia, mesopotámica y china y que es equiparable con las anteriores por su grado de desarrollo. En su momento más álgido esta cultura llegó a establecerse en 14 países del actual sureste de Europa como son la República Checa, Eslovaquia, Austria, Hungría, Rumania, Eslovenia, Italia, Croacia, Bosnia y Herzegovina, Serbia, Montenegro, Albania e incluso con un asentamiento registrado en el este de Grecia, 

Inaugurado en el 2015, como resultado de las excavaciones sistemáticas llevadas a cabo desde 1984, El Muzej vučedolske kulture (Museo de la cultura de Vučedol) muestra magistralmente los aspectos más importantes de esta civilización y de éste, su centro, donde llegaron a habitar más de 3000 personas y que pudo haber sido, en este periodo, el asentamiento más grande de Europa.

El equipo compuesto por el arqueólogo jefe prof. Aleksandar Durman, los arquitectos Radionica arhitekture i la arquitecta Vanja Ilić, responsable del interior y la museografía, son el ejemplo de una colaboración multidisciplinar de altísimo nivel.

El museo dispone de 19 salas destinadas de exposición permanente con unos 1.200m2 de superficie donde se recorren los aspectos de la vida cotidiana, los avances tecnológicos, los conocimientos y la espiritualidad de esta civilización.

El edificio que alberga el museo se integra en la ladera que separa el rio Danubio y la plataforma elevada con la voluntad de minimizar su impacto visual. Con un solo trazo zigzagueante el arquitecto conecta estos dos niveles física y conceptualmente.

Por el exterior el recorrido se hace a través de la cubierta - rampa que nos va proporcionando una vista cambiante del Danubio y su valle hasta que llegamos a la posición superior dominante, donde se situaba el asentamiento empalizado y de donde proceden los valiosos hallazgos expuestos en el interior.

Su única fachada visible la componen una cinta de ladrillo rojizo con una inclinación ascendente continua y un orden vertical de protectores solares por delante de las superficies acristaladas.

El interior es oscuro y elegante, al igual que la museografía. Parece clara la intención de dar protagonismo únicamente a los contenidos. El recorrido se inicia en la parte baja. Las salas del museo se van sucediendo escalonadamente mientras vamos progresando en altura y nos vamos empapando de nuevos conocimientos, siendo conscientes poco a poco del significado, de la autenticidad y de la espiritualidad de este lugar y de esta cultura. La parte del edificio encastada en el terreno, más oscura, está de tanto en tanto iluminada por los patios interiores mientras que, hacia el lado opuesto, la fachada nos va ofreciendo visuales del hermoso paisaje circundante.

Entre los hitos y los logros más importantes de la cultura de Vučedol caben destacar los siguientes:

- Precursores de la casa de tipo Indoeuropeo, con planta sin esquinas formada por troncos dispuestos cada 25-30cm unidos con fibras horizontales (similar al tejido de un canasto de mimbre) y posteriormente recubiertos con arcilla (hasta un espesor de unos 20cm) y encalados. Cubierta a dos aguas con luces de hasta 4m y fibras vegetales como impermeabilización.

- La fundición en serie de metal más antigua, así como la producción del primer bronce del mundo.

- Primera evidencia de carro (prehistórico) de transporte con cuatro ruedas
- El calendario indoeuropeo más antiguo basado en el conocimiento de las constelaciones.
- La primera sierra conocida en el mundo

- Su peculiar vertiente artística por las formas y decoración geométrica de su cerámica de color negro

- Los primeros zapatos con diseño diferenciado para el pie izquierdo y pie derecho

- Entierros rituales relacionados con el conocimiento astronómico

Hasta el momento se han realizado excavaciones arqueológicas únicamente en un 15% del yacimiento por lo que todavía quedan muchos aspectos por descubrir de esta fascinante cultura, que, a buen seguro, dará mucho qué hablar después de haber permanecido en silencio casi 5000 años.

Fco. Javier Luri San Vicente, arquitecto. Corresponsal del COAC en Zagreb, Croacia

Agradecimientos:

Muzej vučedolske kulture

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